Santiago – El Arzobispo de Santiago, Mons. Ricardo Ezzati, ha condenado el ataque que sufrió la Catedral de Santiago por los manifestantes a favor del aborto y ha mostrado “su pesar a los que tienen la obligación de garantizar la seguridad de las personas”.
La nota enviada a la Agencia Fides por la Archidiócesis de Santiago, informa que Mons. Ezzati ha escrito en la carta presentada a la comunidad nacional los acontecimientos que han tenido lugar en la Catedral Metropolitana: “lamente la intrusión violenta de un grupo de anarquistas que irrumpieron en el templo con consignas contra la vida y pro-aborto; la intolerancia de los fanáticos y su irracionalidad violenta ha sido una gran ofensa a Dios y a la comunidad de los creyentes en Cristo. Ha dejado huellas dolorosas con las agresiones y los malos tratos a varias personas, y la destrucción y daños en el patrimonio artístico y religioso del templo principal del país”.
“La Catedral Metropolitana es un lugar público, abierto, declarado monumento nacional, donde se encuentran todos los días cientos de ciudadanos, pero en los últimos tiempos han sido amenazados por las bombas y otros ataques. Esperamos poder gozar en el futuro de la protección a la que tenemos derecho”.
El Arzobispo de Santiago también ha anunciado que los abogados de la Archidiócesis han presentado una denuncia ante los tribunales contra los autores del atentado.
La nota enviada a la Agencia Fides por la Archidiócesis de Santiago, informa que Mons. Ezzati ha escrito en la carta presentada a la comunidad nacional los acontecimientos que han tenido lugar en la Catedral Metropolitana: “lamente la intrusión violenta de un grupo de anarquistas que irrumpieron en el templo con consignas contra la vida y pro-aborto; la intolerancia de los fanáticos y su irracionalidad violenta ha sido una gran ofensa a Dios y a la comunidad de los creyentes en Cristo. Ha dejado huellas dolorosas con las agresiones y los malos tratos a varias personas, y la destrucción y daños en el patrimonio artístico y religioso del templo principal del país”.
“La Catedral Metropolitana es un lugar público, abierto, declarado monumento nacional, donde se encuentran todos los días cientos de ciudadanos, pero en los últimos tiempos han sido amenazados por las bombas y otros ataques. Esperamos poder gozar en el futuro de la protección a la que tenemos derecho”.
El Arzobispo de Santiago también ha anunciado que los abogados de la Archidiócesis han presentado una denuncia ante los tribunales contra los autores del atentado.
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