(ZENIT- 29 abril 2019).- El pasado 27 de abril, la Conferencia del Episcopado de México emitió un comunicado mostrando su gratitud al Papa Francisco por haber respondido a su solicitud de ayuda solidaria para atender la emergencia migrante que se está viviendo en este país.
Caravanas desde Centroamérica
Los obispos señalan en su comunicado que la situación de “grave crisis humanitaria” continúa. Desde octubre de 2018, las caravanas de migrantes procedentes de Centroamérica se suceden: “Tan solo en el mes de febrero del 2019, sumaban ya más de 75 .000 personas, y 100 mil en marzo, según reportan autoridades americanas, que han detenido a esa cantidad de personas en su frontera sur”.
Entre los migrantes que atraviesan el país mexicano están los que se encuentran a la espera de respuesta a su solicitud de asilo como refugiados en EE.UU., los repatriados, los que están intentando llegar a EE.UU ilegalmente y los que pretenden permanecer en México.
Albergues desbordados
El mensaje del episcopado anuncia que se espera la llegada de más caravanas en los próximos meses, por lo que la crisis humanitaria seguirá creciendo. Las personas que llegan a México han sido acogidas en albergues “atendidos en gran mayoría, por agentes de pastoral de la Iglesia Católica, pero también por numerosos organismos de la sociedad civil, y de otras iglesias, ofreciéndoles, tanto como ha sido posible, ayuda humanitaria, moral y espiritual”, según indican los mitrados.
No obstante, también informan que estos centros de acogida están masificados y en algunos de los lugares en los que estos se emplazan los pobladores autóctonos “’criminalizan’” al migrante, e impiden que éstos puedan obtener un trabajo, rentar un departamento o circular tranquilamente por las calles”.
La conferencia episcopal explica que se precisa “una mayor y mejor vinculación entre la fuerte estructura pastoral y nacional de la Iglesia católica y el gobierno en todas sus instancias”, algo que no se ha podido producir hasta el momento.
La ayuda del Papa
A través del Óbolo de San Pedro, institución encargada de la administración de la ayuda económica que los fieles ofrecen al Santo Padre, el Papa Francisco realizó una donación de 500 mil dólares para proporcionar alojamiento, comida y productos de primera necesidad a los migrantes de los albergues de México.
Los obispos notifican que desde el episcopado se organizó, en febrero de 2019, un Encuentro Nacional con responsables de Casas de Migrantes en el que se hizo balance de las necesidades de los albergues. Después, se instó a la presentación de proyectos para asignar adecuadamente el dinero recibido.
El comunicado revela que se recogieron 27 solicitudes de 16 Diócesis del país. De estos 27 proyectos, 13 ya han sido aprobados, y otros 14 están en proceso de verificación para “garantizar la entrega ordenada y transparente de los recursos”.
Llamamiento
Finalmente, los Obispos realizan un llamamiento “a los gobiernos de México y Estados Unidos para acoger e integrar a los miles de migrantes que ya están en nuestro país, a los medios de comunicación dar cobertura objetiva y justa, ante las caravanas que siguen llegando, y a los hombres y mujeres de buena voluntad, que habitan nuestro amado país, a mirar con caridad y misericordia al hermano migrante que sufre, y a no cerrar el corazón y seguir apoyando”.
También piden que la Virgen de Guadalupe, “Madre de los mexicanos y de nuestros hermanos migrantes, interceda ante su Hijo, para que nos fortalezca en este caminar”.
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