(RV).- Tuvo lugar en el mediodía de este martes 27 de setiembre la Conferencia de Prensa de presentación de la 36ª Congregación General de la Compañía de Jesús en la Curia General de los jesuitas en Roma.
Los relatores fueron, por el idioma italiano el padre Federico Lombardi, SJ Asistente ad Providentiam y Consejero General, ex provincial de Italia, por el español el padre Orlando Torres, Rector del Colegio Internacional del Jesús y precedentemente Superior Regional de Puerto Rico, Coordinador de la formación para América Latina y Consejero General de la Formación para la Compañía Universal. Por el inglés fueron relatores el Padre Antonio Moreno, provincial de la Provincia de Filipinas y miembro del Coetus Praevis (el Comité de Preparación) y del Comité de Coordinación del CG36 y el Padre Patrick Mulemi, Director de la Oficina de Comunicación y Relaciones Públicas de la Compañía, y portavoz de la Curia General.
La Congregación General de la Societas Iesus, vale decir, la más alta instancia de la Orden fundada por san Ignacio de Loyola, iniciará el 2 de octubre con una Concelebración en la Iglesia del Santo Nombre de Jesús, mientras que la primera asamblea plenaria tendrá lugar el día lunes en la Curia General.
En dicha Congregación participarán 215 religiosos en representación de los jesuitas provenientes de los cinco continentes, y entre ellos, por primera vez, seis hermanos jesuitas no sacerdotes con derecho a voto.
El padre Orlando Torres explicó las dos tareas fundamentales de la CG, a saber, elegir el General, y tratar asuntos de importancia para la Compañía de Jesús. El procedimiento de la primera parte de la Congregación, es decir, la elección del Prepósito general, “se encuentra completamente en la Fórmula de la Congregación General”, refirió. En la primera semana los electores leen el informe sobre el Estado de la Compañía, que permite definir el perfil adecuado para el jesuita que deberá ser elegido como General. Sucesivamente, y dado que no hay candidatos, se dedican cuatro días a las llamadas “murmuraciones”, las conversaciones con las que cada miembro de la Congregación puede pedir información a otro sobre cualquier jesuita. Es un tiempo de discernimiento que se realiza en oración, recogimiento y penitencia, y en el que se pueden intercambiar informaciones “de uno a uno”, “no puede haber grupos”, para evitar campañas y grupos de presión. Es precisamente durante ese proceso en el que se van perfilando quienes podrían ser las personas indicadas para el generalato.
La elección, luego de los adecuados procesos de discernimiento, suele ser “serena, suave y pacífica”, precisó el padre Torres, y después de este “proceso precioso” es el Sucesor de Pedro el primero a ser informado sobre el resultado de la votación.
Por su parte el padre Federico Lombardi realizó una radiografía del estado ‘demográfico’ de la SJ en el mundo, que se refleja en la Congregación General con jesuitas que llegan de sesenta y dos países diferentes, que ha llevado y lleva también en el Gobierno de la Compañía, a una reorganización del mismo, (se unen provincias que están haciéndose más pequeñas, y se abren nuevas en otras zonas) en vistas al notable crecimiento de miembros en el sur de Asia y África, y a la disminución de la vida religiosa de la Compañía de Jesús en países con antigua tradición cristiana.
El prelado explicó asimismo quiénes participan en la Congregación General, a la que acuden los provinciales y las personas "de oficio", aunque en la mayoría se trata de las personas elegidas por las asambleas de las provincias, en proporción a las mismas.
Un pantallazo general también del p. Lombardi sobre la actividad de los jesuitas, que se caracterizan por no tener una actividad específica en el mundo, sino por ser una Orden creada para responder a las misiones que el Papa quiera dar a la misma y a las urgencias de la Iglesia en el mundo, con una fuerte tradición en el Ministerio Espiritual, que está en la naturaleza misma de la Compañía, pero también en el Ministerio Pastoral, en definitiva, un Cuerpo Apostólico al servicio de la Iglesia Universal, en particular a través de las indicaciones del Sumo Pontífice.
(Griselda Mutual – Radio Vaticano)
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