Kara (Agencia Fides) - "La situación de las iglesias cerradas ha sumergido a muchos cristianos africanos en la triste y dolorosa experiencia de la tumba sellada, un símbolo de desesperación y fracaso", escribe el p. Donald Zagore, SMA a Fides. Las iglesias se están abriendo gradualmente y, a pesar de la presencia aún activa del virus asesino, los cristianos viven en la inmensa alegría de la tumba abierta, un signo de resurrección y victoria".
En el mensaje enviado a Fides, el p. Zagore, teólogo marfileño de la Sociedad para las Misiones Africanas, explica que el “Covid-19 todavía está presente, pero la creencia de todos los cristianos de que será derrotado prevalece contra cualquier angustia motivada por la realidad actual. Para los cristianos, el mal, independientemente de su virulencia, nunca tendrá la última palabra. El triunfo sobre el mal es una garantía. Prevalece la certeza de que Dios, que hace todas las cosas nuevas (Apocalipsis 21:5) ahora se convierte en el proyecto de vida, la fuente viva de toda esperanza cristiana".
El p. Zagore insta a "no hundirse en la indiferencia y la irresponsabilidad". Con estos conceptos en mente, el sacerdote marfileño nos invita a insistir en el cumplimiento de las medidas preventivas establecidas contra el Covid-19 en las iglesias como un imperativo fundamental y vital: “Dios da la victoria, pero la acción y la responsabilidad humanas son necesarias. Como dice San Agustín, Dios nos creó sin nosotros, pero no puede salvarnos sin nosotros".
“La resurrección no aniquila completamente el mal - concluye el p. Zagore -, pero libera una luz de esperanza que atraviesa las nubes de angustia para abrir una nueva era. Con la resurrección, ya no estamos obligados a quedar atrapados en un destino fatal que solo confirmaría lo absurdo del momento presente".
(DZ/AP) (19/5/2020 Agencia Fides)
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