, 20 May. 20 (ACI Prensa).-
El Papa Francisco afirmó que los verdaderos valores del deporte, como la unidad y la solidaridad, permiten afrontar este tiempo de pandemia del coronavirus, especialmente ante el difícil reinicio tras la cuarentena que se ha impuesto en muchos lugares para impedir el avance del COVID-19.
Así lo indicó el Santo Padre en una audiencia privada este miércoles en la que recibió a una pequeña delegación de corredores que iban a participar mañana del evento organizado por Athletica Vaticana titulado “We Run Together” (Corremos juntos), que se suspendió por la pandemia del COVID-19 y que tenía también un fin solidario.
“Los aliento, queridas amigas y amigos deportistas, a vivir siempre más vuestra pasión como una experiencia de unidad y solidaridad, los verdaderos valores del deporte que son importantes para afrontar este tiempo de pandemia y, sobre todo, el difícil reinicio. Con este espíritu los animo a correr juntos, la carrera de la vida”, dijo el Santo Padre en la Biblioteca Apostólica Vaticana.
En la audiencia estuvieron presentes miembros de Athletica Vaticana, del grupo deportivo Fiamme Gialle de la Guardia de Finanza, del “Patio de los Gentiles”, estructura del Pontificio Consejo de la Cultura que promueve el diálogo entre creyentes y no creyentes, y de la Federación Italiana de Atletismo Ligero FIDAL-Lazio.
La Oficina de Prensa del Vaticano informó que el Cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del pontificio consejo, presentó la iniciativa al Papa, que luego dialogó brevemente con una pequeña atleta que tiene una afección neurodegenerativa.
Francisco resaltó que en el evento habrían corrido “por primera vez campeones olímpicos con atletas paralímpicos, atletas con discapacidad mental, refugiados, migrantes y encarcelados, que habrían sido jueces en la competencia. Todos juntos y con la misma dignidad”.
Esto, dijo el Papa, es “un testimonio concreto sobre lo que debería ser el deporte: es decir un ‘puente’ que une mujeres y hombres de religiones y culturas distintas, promoviendo la inclusión, la amistad, la solidaridad, la educación, Es decir, un ‘puente’ de paz”.
“Mañana no se podrá correr con las piernas, pero se podrá correr con el corazón”, resaltó el Pontífice.
El Papa destacó luego la alegría de dar, de “ofrecer la belleza del deporte” e indicó que esta es una actitud “humana y creativa. Ya que las personas también ofrecen sus propias vidas como hacen las madres y los padres por sus hijos”.
El Santo Padre resaltó además que, como ocurre en las peregrinaciones del Camino de Santiago en España, “hay una regla que dice que se debe andar al paso de quien es más débil”, algo que “debemos aprender como humanidad: ir al paso de las personas que tienen otro ritmo, o al menos considerarlas o integrarlas en nuestro paso”.
El Papa Francisco explicó también que, en el marco de esta iniciativa de Athletica Vatican, “muchos atletas pondrán a disposición algunos objetos y experiencias deportivas para una iniciativa de beneficencia”.
Lo recaudado será entregado al personal sanitario de los hospitales Papa Juan XXIII en Bérgamo y la Fundación Poliambulanza de Brescia, lugares que se han convertido en “símbolos de la lucha contra la pandemia que ha golpeado a todo el planeta”.
“Es una iniciativa para ayudar y agradecer a las enfermeras, enfermeros y el personal hospitalarios que son héroes”, destacó el Santo Padre.
Athletica Vaticana nació de manera espontánea del encuentro de varios trabajadores del Vaticano que corrían muy temprano en las mañanas y a quienes la Secretaría de Estado dio forma jurídica.
En este equipo de corredores del Vaticano hay 18 nacionalidades. El más joven es un Guardia Suizo de 19 años mientras que el mayor tiene 62 y es profesor de la Biblioteca Apostólica Vaticana.
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