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Compartimos algunos momentos con el Papa Francisco

(RV).- Proclamar como hizo San Pablo la buena nueva del amor y de la reconciliación que Dios ofrece plenamente a la humanidad en Cristo, exhortó el Papa Francisco a los hermanos ortodoxos, anglicanos y de otras confesiones cristianas, recordando que el encuentro con Jesús en el camino de Damasco transformó radicalmente la vida del Apóstol de los Gentiles.

Y destacó que «la revolución que Pablo vivió, es también la revolución cristiana de todos los tiempos: no vivir para nosotros mismos, para nuestros intereses y beneficios personales, sino a imagen de Cristo, por él y según él, con su amor y en su amor»

En su homilía al concluir la Semana de Oración por la unidad de los cristianos, el Obispo de Roma afirmó que «nuestra oración» «participa en la oración que Jesús dirigió al Padre antes de la pasión, «para que todos sean uno» (Jn 17,21).

También en la cita mariana dominical, el  III Domingo del Tiempo Ordinario, después del rezo a la Madre de Dios, el Santo Padre  invitó a perseverar en la oración por la Unidad de los Cristianos.

Introduciendo el rezo del Ángelus, el Papa Francisco exhortó a «llevar la palabra, el amor y la ternura de Jesús a todos los ambientes, también los más difíciles y resistentes: a todas las periferias».

Haciendo hincapié  en que todos los espacios de la vida humana son terreno en el cual echar la semilla del Evangelio, para que brinde frutos de salvación, el Santo Padre invocó a la Virgen María, para que con su maternal intercesión nos ayude a responder con alegría a la llamada de Jesús y a ponernos al servicio del Reino de Dios.

El Obispo de Roma reiteró  asimismo su cercanía a las poblaciones de Italia central que siguen sufriendo por el terremoto y las intensas nevadas, con una oración especial y aliento también a los equipos de socorro.

Y recordando que en Extremo Oriente y en varias partes del mundo, millones de personas se preparan para celebrar el nuevo año lunar, el Papa deseó a las familias que sean cada vez más escuela de amor y respeto, para que se irradie en toda la sociedad.

(CdM – RV)