VATICANO, 31 Ago. 19 (ACI Prensa).-
Tras haber sido el líder de la reforma de las comunicaciones en el Vaticano y haber permanecido como asesor del Dicasterio para la Comunicación durante 16 meses, Mons. Dario Edoardo Viganò se despidió de esta oficina del Vaticano para comenzar a trabajar en las Pontificias Academias de las Ciencias y de las Ciencias Sociales, realidades que seguirán siendo lideradas por el Arzobispo argentino Marcelo Sánchez Sorondo.
La noticia de tal cambio realizado por el Papa Francisco fue publicada oficialmente este sábado 31 de agosto en una nota de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
“El Santo Padre ha nombrado vice canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias y de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales, con competencia específica para el sector de las comunicaciones, al Rev. Mons. Dario Edoardo Viganò, hasta ahora asesor del Dicasterio para la Comunicación”, señaló el comunicado oficial del Vaticano.
Mons. Viganò fue el director del ex Centro Televisivo Vaticano (CTV), ahora Vatican Media, y llegó a ser el Prefecto de la entonces Secretaría de la Comunicación encabezando la reforma de los medios del Vaticano que aún está en curso.
Renuncia polémica
Sin embargo, Mons. Dario Edoardo Viganò tuvo que presentar su renuncia al Papa Francisco en marzo de 2018 tras la polémica publicación de fragmentos de una carta personal del Papa Emérito Benedicto XVI.
Medios de comunicación como la agencia de noticias Associated Press (AP) señalaron una “presunta manipulación” del texto de Benedicto XVI con ocasión de la publicación de la colección “La teología del Papa Francisco”.
De acuerdo a AP, con la presunta manipulación la Secretaría para la Comunicación de la Santa Sede habría alterado “notablemente el significado de las citas” de Benedicto XVI.
En esa ocasión, Mons. Viganò envió una carta de renuncia dirigida al Santo Padre, en la que reconoció que se habían producido “muchas polémicas” en relación a su trabajo y que, “más allá de las intenciones” los recientes episodios desestabilizaban “el complejo y gran trabajo de reforma” que Francisco le había confiado en junio de 2015.
Por ello, el Pontífice dejó a cargo provisionalmente al secretario de ese dicasterio, Mons. Lucio Adrián Ruiz, y explicó en otra carta pública dirigida a Mons. Viganò que respetaba su decisión y recibía “no sin cierto pesar, su dimisión como Prefecto”.
El Santo Padre, sin embargo, solicitó públicamente y por escrito que Mons. Dario Viganò permaneciera en esa estructura vaticana y lo nombró “asesor del Dicasterio de la Comunicación para poder dar su contribución humana y profesional al nuevo Prefecto en el proyecto de reforma querido por el Consejo de Cardenales, por mí aprobado y regularmente compartido”.
De este modo, Mons. Dario Edoardo Viganò continuó colaborando con el Dicasterio de la Comunicación con diferentes proyectos.
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