Por: Joachin Meisner Hertz.
“Lautsi vs Italia” fue un célebre caso en el que un italiano demandó a su patria por permitir que se exhibieran crucifijos en las aulas, hecho que según él violaba la neutralidad del Estado. Perdió la demanda. A raíz de un nuevo caso en que un profesor italiano no creyente fue sancionado por negarse a dar clases en un salón donde se encontraba un crucifijo, pues pedía que se removiese para hacerlo no obstante que la mayoría de los estudiantes votó a favor de dejarlo, y ante la proximidad de una sentencia al respecto, el profesor Joseph Weiler, jurista hebreo de religión, concedió una entrevista a L´Osservatore Romano pronunciándose a favor de la presencia de los crucifijos en las aulas.
Weiler refiere que la cristofobia es comúnmente más aceptada que el antisemitismo. Y agrega: “Imagínate que aquel enseñante fuese invitado a enseñar en una escuela hebrea, donde hay una mezuzah colgada en cada puerta. Espero que no lo piense dos veces y se ponga felizmente a enseñar. Y si en la escuela objeto de la causa ante el tribunal la mayor parte de los estudiantes fuese hebreo y hubiera pedido que en la puerta fuese colgada una mezuzah en lugar de un crucifijo, imagino que también aquí enseñaría felizmente por respeto a la sensibilidad religiosa de sus estudiantes hebreos. Pero un crucifijo no!”.
El profesor Weiler declara a L´Osservatore Romano que no se siente ni limitado ni ofendido en su libertad como docente ante la presencia de un crucifijo: “¿Cómo puede un hebreo objetar que esté expuesto sobre un muro uno de los hebreos más importantes de la historia? Más allá de las bromas, he enseñado en aulas endosando una kipá. Y estoy convencido que la mayor parte de mis colegas católicos y laicos no harían ninguna objeción si deberían enseñar en un aula con una mezuzah o en un aula sin símbolos religiosos si fuese este el deseo de sus estudiantes. Tomo este argumento con los alumnos, haciéndolo ocasión para una breve explicación de la necesidad de tolerancia y respeto recíproco”.
Joseph Weiler defendió ante la Corte de Estrasburgo, en el caso “Lautsi vs Italia”, la libertad a favor del crucifijo. La diferencia en esta ocasión es que no hay jurisprudencia dado que no existen normas para la presencia del crucifijo en aulas públicas de nivel superior.
Publicar un comentario