Por: Valentina di Giorgio.
En el contexto de la 74ª Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que se ha desarrollado este 2021 de forma virtual, debido a la pandemia, la Santa Sede ha sido aceptada como “observador” en la sesión del lunes 31 de mayo de 2021.
La acogida de la Santa Sede contó con el respaldo de 71 países de todas las áreas geográficas y se logró gracias al respaldo y propuesta inicial de Italia. De hecho, es la web del Ministerio de Asuntos Exteriores del Estado Italiano, y no la web de la OMS, la que comunica la noticia: “Se trata de un reconocimiento del importante papel desarrollado por la Santa Sede en campo humanitario y sanitario, en particular en los países en vías de desarrollo y últimamente en el combate contra la pandemia”.
La cuenta de Twitter del Ministerio Italiano de Exteriores también se hizo eco de la noticia comunicando que el ministro Luigi di Maio había hablado por teléfono con el ministro de asuntos exteriores de la Santa Sede, Mons. Paul Richard Gallagher. La entrada de la Santa Sede representa -según el comunicado del Minsterio Italiano- “un indudable éxito para el multilateralismo y contribuirá a reforzar la cooperación en campo sanitario”.
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