Timika (Agencia Fides) - Un grupo de asociaciones católicas y laicas de Indonesia envió una carta a las Naciones Unidas para que el Comisionado de la ONU para los derechos humanos investigue el caso del asesinato de Rufinus Tigau, el catequista católico asesinado por las fuerzas de seguridad el 26 de octubre de 2020 en la provincia de Papúa. El joven salió desarmado para pedir explicaciones a una patrulla por los tiroteos que se estaban produciendo en la aldea de Kampung Jibaguge (distrito de Sugapa, regencia de Intan Jaya, provincia de Papua). En ese momento fue ejecutado.
De acuerdo con la información enviada a Fides, la implicación de la ONU podría acelerar la posibilidad de iniciar una investigación independiente para garantizar justicia a la familia para que esta muerte no quede impune. El caso, ilustrado por la Agencia Fides gracias a un informe detallado de la Iglesia local y las órdenes religiosas de Papúa (ver Fides 11/11/2020), continúa creando estupor en Indonesia porque no se ha tomado ninguna iniciativa para identificar a los responsables.
En los últimos días, representantes de la Iglesia católica en Indonesia se reunieron en su residencia con Mahfud, el ministro coordinador de asuntos políticos, legales y de seguridad. Estuvieron presentes, entre otros, el cardenal Ignatius Suharyo Hardjoatmodjo, arzobispo de Yakarta y presidente de la Conferencia Episcopal de Indonesia; monseñor Aloysius Murwito, obispo de la diócesis de Agats; y monseñor Petrus Canisius Mandagi, recién nombrado arzobispo de Merauke, en Papúa. Los líderes religiosos expresaron su preocupación por la propagación de la violencia en el archipiélago, subrayando que, en muchas ocasiones, la intervención militar solo exacerba los ánimos. Indicaron que la forma correcta de resolver las disputas debe ser a través del diálogo.
El padre Martín Kuayo, administrador de la diócesis de Timika, recuerda a Fides que el caso de Rufinus “no es el primer caso de violencia que afecta a miembros de la Iglesia católica. El 7 de octubre también tirotearon a otro catequista, Agustinus Duwitau. Si guardamos silencio sobre estos incidentes me temo que las cosas empeorarán”, sentencia. Se acusa a los laicos católicos de ser miembros del Grupo Armado Criminal Separatista (Kelompok Kriminal Separatis Bersenjata - KKSB), o del Ejército de Liberación Nacional de Papúa Occidental (Tentara Pembebasan Nasional Papua Barat - TPN-PB), acusaciones firmemente rechazadas por Iglesia local.
Las organizaciones cristianas locales también señalan otros dos casos recientes en los que líderes cristianos de Papúa fueron asesinados en circunstancias poco claras. Uno es el del pastor protestante Yeremia Zanambani, asesinado a tiros por soldados de la regencia de Intan Jaya el 19 septiembre de 2020. Unos días después, el 22 de septiembre, el pastor Albert Degei fue encontrado muerto en el pueblo de Kalisemen, regencia de Nabire.
(MG/PA) (Agencia Fides 17/11/2020)
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