VATICANO, 20 Dic. 19 (ACI Prensa).-
El Papa Francisco visitó por sorpresa la escuela secundaria de Roma “Pilo Albertelli” y se reunió con casi 800 jóvenes estudiantes a quienes advirtió sobre la “soledad mal vivida que lleva a la melancolía”.
La visita se realizó este 20 de diciembre por la mañana tras la audiencia que el Santo Padre tuvo con el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres.
El Santo Padre llegó en coche a esta institución escolar, cercana a la Basílica de Santa María la Mayor, a las 11:25 a.m. (hora de Roma) y fue recibido por el director de L’Osservatore Romano, Andrea Monda, quien fue profesor allí y por la directora de la escuela.
En primer lugar, el Papa saludó a los maestros, al personal que trabaja allí y a los jóvenes que redactaron los textos de las meditaciones del Vía Crucis del Viernes Santo del año 2018.
Después, el Pontífice se trasladó al patio de la escuela en donde fue recibido por casi 800 jóvenes estudiantes, y algunos de ellos lo recibieron con un canto.
Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el Papa Francisco respondió espontáneamente a algunas preguntas de los jóvenes. Entre los temas que abordó, se encontró el de “la soledad, que mal vivida lleva a la melancolía” y habló también "del amor gratuito, un camino difícil, hecho de ‘podaduras’ de sí mismos, de paciencia, de pequeños sacrificios".
Luego, le preguntaron sobre la convivencia entre distintas culturas y religiones por lo que el Papa habló “de las migraciones, también en su propio país, Argentina y de cómo llevaron a la necesidad de vivir juntos”.
Además, Francisco se dirigió a los no creyentes y señaló “el valor del testimonio para que despierte la curiosidad hacia el Evangelio y la fe” y les recordó a los jóvenes la importancia del juego y del sueño que “lleva oxígeno al alma”.
Por último, el Papa conversó sobre “los verdaderos maestros” y destacó la relación entre el maestro y el discípulo, “un don que él mismo recordó en los días anteriores al compartir reflexiones de su padre espiritual, Miguel Ángel Fiorito sj” en la presentación de una publicación especial de la revista italiana La Civiltà Cattolica.
Finalmente, el Santo Padre deseó feliz Navidad a todos, mientras que recordó algunas trágicas situaciones de guerra por lo que les comentó que había grabado previamente un video mensaje a favor de la paz junto al secretario general de la ONU.
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